Para la utilización de diferentes gases es necesario transportarlos desde el lugar de obtención o fabricación al de uso o consumo. En función de las características del gas que se trate, se procede a comprimirlos, licuarlos e incluso a disolverlos a presión en un medio acuoso (el caso más típico es el acetileno)
Todo ello conlleva asumir nuevos riesgos a los derivados de sus propiedades, entre los principales riesgos de la utilización de botellas podemos citar:
- Explosión debida por un aumento de la presión.
- Incendio o explosión por escape de gases inflamables.
- Inhalación o contacto con gases tóxicos, irritantes o corrosivos y por asfixia
- Golpes por caída de sus envases durante su manipulación.
Para facilitar la identificación del contenido, las botellas están coloreadas de acuerdo a un código de colores. Recientemente ha entrado en vigor la Nueva Normativa EN 1089-3
Uno de los requisitos del Reglamento es la adaptación a la Norma EN 1089-3 que define los colores europeos de las botellas de gas. La norma establece un plazo de cinco años (hasta el 31 de julio de 2014) para que todas las botellas estén pintadas según los nuevos colores. Durante este periodo de tiempo convivirán las botellas pintadas según la normativa anterior y la nueva.
Al mismo tiempo que se le hagan llegar las primeras botellas con los nuevos colores, el transportista le entregará un tríptico explicativo con información detallada sobre esta norma.
En cualquier caso los aspectos más relevantes de la misma son:
- Regula únicamente el color de la ojiva (parte superior de la botella) en función del riesgo asociado al contenido de la botella: tóxico y/o corrosivo, inflamable, oxidante, inerte.
- El color del cuerpo (parte inferior de la botella) es de libre aplicación y no se identifica con el riesgo del gas, pudiendo ser elegido por el fabricante a condición de que no genere confusión con los colores de riesgo de la ojiva.
- Para evitar confusiones, las ojivas de las botellas pintadas con los nuevos colores se identifican con dos letras N (Nuevo) mayúsculas. Lógicamente, los gases que no cambian de color no incorporarán la letra N en la ojiva.
- La única indicación vinculante que informa del gas contenido en la botella es la etiqueta banana. El color de la ojiva de la botella sirve solamente como información complementaria sobre las propiedades del gas.
Por este motivo y especialmente durante el periodo de transición entre las dos normas, recomendamos que se ponga especial atención a la etiqueta banana de las botellas.
Reglas Generales. Los colores principales de las ojivas son:
- Tóxico y/o corrosivo: AMARILLO
- Inflamable: ROJO
- Oxidante: AZUL CLARO
- Inerte: VERDE INTENSO
Existe un documento disponible para su impresión en la web www.airliquide.es, además de más información al respecto.
A lo largo de su vida útil las botellas deben soportar presiones elevadas (p.e. 200 kg/cm2 para el nitrógeno) se debe garantizar la seguridad mecánica de las mismas frente a los esfuerzos que dichas presiones producen.
El Reglamento de aparatos a presión establece las condiciones que deben cumplir en cuanto a diseño, espesores, control de fabricación, ensayos destructivos para cada tipo de botella, etc. Tras su fabricación se someten a una prueba hidráulica de presión y a lo largo de su vida útil las botellas deben ser sometidas a inspecciones periódicas para ver su estado y a pruebas de presión.
En caso de incendio de un local o nave que contenga botellas, si es posible se deben retirar las botellas de gases con la máxima celeridad. Si no se pueden retirar, se refrigerarán con agua. Se debe evacuar la zona.
Todo lo anterior está muy bien, pero en los incendios deberemos pensar o intuir la posibilidad de la presencia de botellas de gases, bien preguntando al propietario o bien realizando el reconocimiento del entorno del incendio.
A veces su existencia es advertida, pero en otras no, y generalmente cuando visualizamos un incendio en una nave o recinto con una caótica o anárquica acumulación de enseres, máquinas, etc., tenemos que empezar a sospechar la posibilidad de su existencia, desde una botella de butano arrinconada y olvidada o un pequeño equipo de oxicorte que no se usa hace bastante tiempo, o la existencia de una botella de camping gas (botella azul).
Por que el prevenir nos puede salvar la vida o de un accidente grave.
"Cada vez que le ocurra un accidente, no olvide reflexionar sobre las posibilidades que tiene de poder sacarle provecho a esta circunstancia".
Epictetus, 60- 120 A.C.
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